Iván Duque ya está en Washington para su visita oficial a Donald Trump. El presidente colombiano durmió en la habitación de huéspedes ilustres de la Casa Blanca y muy temprano en la mañana ya estaba reuniéndose con Carlos Vecchio, embajador de Venezuela en Estados Unidos.
Tras conversar con Vecchio, Duque aseguró que reitera el compromiso de Colombia para con los venezolanos, “que han huido de la dictadura buscando refugio en nuestro pais (…) seguimos avanzando en el cerco dioplomatico a la usurpación del dictador Maduro, para que el pueblo venezolano pueda volver a acariciar la libertad”, dijo.
Duque agregó que Colombia hará todo lo que esté en sus manos para brindar ayuda humanitaria al vecino país a través de los centros de acopio: “garantizando que pueda llegar a Venezuela, la gente está preocupada porque lleguen medicamentos, alimentos”. Para el presidente de Colombia, Venezuela vive la peor crisis humanitaria de su historia.
#Washington Les comparto el siguiente mensaje de @carlosvecchio, embajador del legítimo gobierno de #Venezuela en Estados Unidos. Agradecemos profundamente sus palabras para el pueblo colombiano. #DuqueEnEEUU1.85210:09 – 13 feb. 20191.286 personas están hablando de estoInformación y privacidad de Twitter Ads
“La dictadura está impidiendo que llegue esa ayuda, lo que es además un crimen de lesa humanidad”, dijo. Con Trump, quien desde que asumió el poder en 2017 ha cancelado dos visitas a Colombia, Duque se encontrará al mediodía en la Casa Blanca.
Los dignatarios discutirán sobre “los esfuerzos para restaurar la democracia en Venezuela”, alianzas para la seguridad regional, la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico, informó la Casa Blanca la semana pasada en un comunicado. Estados Unidos y Colombia impulsan la salida del poder de Nicolás Maduro en Venezuela, cuyo mandato consideran “ilegítimo” y al que responsabilizan de la aguda crisis económica que atraviesa la otrora potencia petrolera, que forzó la salida del país de al menos 2,3 millones de personas desde 2015, según la ONU.
Los gobiernos de Trump y Duque apoyan desde el primer momento al opositor Juan Guaidó, reconocido actualmente por medio centenar de países como presidente interino de Venezuela, para liderar un gobierno de transición y convocar nuevas elecciones. Trump no descarta una intervención militar en Venezuela, mientras que Duque rechaza esa opción y aboga por aumentar la presión diplomática. Colombia, que comparte 2.200 kilómetros de frontera con una Venezuela sumida en la peor crisis en su historia moderna, ha recibido a 1,1 millones de migrantes de ese país. Estados Unidos le ha ofrecido a su estrecho aliado en la región más de 92 millones de dólares para atender la ola migratoria.
En la frontera de Colombia con Venezuela se agolpan toneladas de ayuda humanitaria enviada por Estados Unidos a pedido de Guaidó, que Maduro se niega a dejar entrar por considerarlo el primer paso de una intervención. Trump también ha criticado con severidad el alza histórica de los cultivos de hoja de coca en Colombia, que según la ONU llegaron a 171.000 hectáreas sembradas en 2017. Tras cuatro décadas de lucha contra el narcotráfico financiada por Estados Unidos, Colombia se mantiene como el principal productor mundial de cocaína.
Duque, que asumió el poder en agosto de 2018, ha reconocido que las relaciones entre ambas naciones están narcotizadas por cuenta de este aumento exponencial de estos cultivos. La visita oficial de cuatro días de Duque incluye reuniones con líderes del Congreso estadounidense, empresarios y directivos de organismos multilaterales.